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Divertida despedida de la gira con “El año que viene a la misma hora” tuvieron Adrián Suar y Julieta Díaz, quienes, junto al productor “Nacho”Laviaguerre visitaron la bodega “Zuccardi”en Mendoza, saliendo más sonrientes de lo que estaban cuando llegaron.
Según parece tomaron algunas copitas de la especialidad de la casa, el “Zuccardi zeta 2002”, sin fijarse en eso de que el alcohol fiha las grasas.
El actor y productor se relajó, no solo porque fueron las últimas dos funciones de la obra (tuvieron 2.100 personas en el Auditorio Bustelo), sino porque con el rating de la ficción “Malparida” le volvió el alma al cuerpo. El trío se alojó en el cinco estrellas de la provincia y ayer al alba estaba retornando en avión privado. Griselda controla por teléfono, vale decir. Y, no se iba a escapar.
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