
Se trata del Utahceratops Gettyi, un animal del tamaño de un rinoceronte, y del Kosmoceratops, que tenía 15 cuernos en su cabeza.
Aunque el Kosmoceratops era más chico que el Utahceratops Gettyi, tenía una ventaja para nada desdeñable: 15 cuernos filosos repartidos en su cráneo de dos metros de largo, informó el diario inglés The Guardian. Se calcula que los dinosaurios encontrados habitaron la Tierra hace 76 millones de años, cuando el terreno era cálido y empantanado.
Ahora, los científicos buscan saber para qué utilizaban los cuernos el Kosmoceratops, que tenía la dentadura propia de un ser hervíboro. "Estos animales eran básicamente rinocerontes enormes con muchos cuernos en la cabeza. Tenían cráneos muy grandes con respecto al resto de sus cuerpos", señaló Scott Sampson, miembro del equipo de investigación del museo.
El Kosmoceratops tenía un cuerno sobre su nariz, como el rinoceronte actual, pero además ostentaba sendos cuernos sobre sus pómulos, ojos y una hilera de 10 protuberancias en la parte posterior de la cabeza. Lejos de tratarse de armas letales para la lucha territorial, los científicos se decantaron por la idea de que pudieran servir para atraer a posibles parejas.
"A veces es bueno tener una forma visual de posicionarse con respecto a otros animales. Se pueden evitar conflictos innecesarios y es probable que fuera lo que hacían", atinó Sampson. En las especies recién encontradas, pareciera ser que tanto machos como hembras tenían cuernos en la cabeza, como una forma de evitar que los predadores atacaran al "sexo débil".
Los investigadores se refirieron al hallazgo como "uno de los últimos tesoros de dinosaurios inexplorados en el continente", al que se accede escalando. La zona fue denominada Laramidia, también conocido como "el continente perdido".
"En ese momento, este terreno era un pantano con clima mediterráneo. Debe haber sido un gran lugar para vivir, salvo por los Tiranosaurios", concluyó Sampson. 22222222222222222222222222