A estas alturas no me extrañaría que todavía hubiera algún miembro de las asociaciones de padres americanos que albergara alguna esperanza de que Miley Cyrus recupere la senda infantil de Hannah Montana.Si con Who Owns My Heart la cosa ya quedaba bastante clara, con el nuevo videoclip de Kevin Zegers, que forma parte del proyecto Rock Mafia
en el que participa exclusivamente como actriz, no hay duda de que Miley ha optado por el camino adulto, como en su momento hizo Enrique del Pozo al desmarcarse del dueto musico-infantil Enrique y Ana.
El videoclip en sí parece la puerta de entrada de Miley a un universo limitadamente parecido al de David Lynch, lo que de por sí debe de aterrorizar a los papás americanos viendo el contenido de sus películas.
En él Miley parece una especie de ensoñación romántica de Kevin Zegers, que interpreta a un empleado de párking. Justo después de que ambos entrelacen sus miradas, Miley sufre un accidente de tráfico. Kevin sale inmediatamente en su auxilio y ahí empieza una misteriosa persecución que no se sabe si ocurre en realidad o en la mente de alguno de los dos protagonistas.
En honor a la verdad hay que decir que el videoclip no es tan subido de tono como el de Who Owns My Hearth, o al menos no se ve tanta superficie epidérmica de Miley. Aunque a mi entender lo que realmente le sube el tono son las miradas que le lanza a Kevin.
No me sorprende que el pobre chico se quede desorientado buscándola y soñándo con ella hasta estando despierto. Es como si le estuviera diciendo sin palabras “porque hay cámaras delante que si no te comía hasta los metacarpianos”.
Esta semana ha sido una semana dura para Miley después de haberse conocido públicamente que Billy Ray Cyrus ha pedido el divorcio de su esposa Tish.
A la vez los rumores de crisis con su pareja Liam Hemsworth se han disparado después de haber visto al joven muy bien acompañado por una modelo en Australia el pasado fin de semana.
¿Mirará a Liam igual que mira a Kevin en el videoclip?.
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