
Oscar, cuyas patas fueron cortadas por una cosechadora, puede correr y saltar, gracias a los implantes mecánicos.
El implante se ubica luego de perforarse los tobillos, y después se trata con una sustancia que permite sorprendentemente que el hueso y la piel crezcan a su alrededor. Cuatro meses más tarde Oscar dio su primer paso. Ahora corre. El doctor Noel Fitzpatrick, pionero en este tratamiento, dijo que las técnicas que se utilizan “están llamadas a transformar el futuro” de la ortopedia.
