
Ahora ha tocado París. Hasta allí se ha desplazado la cantante unos días para disfrutar de la ciudad del amor.
Taylor se paseó por las románticas calles de la capital francesa donde se encontró a algunos fans que la reconocieron, con los que se paró a hablar, hacerse fotografías y firmar autógrafos. “No me importa para nada la fama. No es tan difícil como la gente dice, yo no me quejo”, ha comentado en alguna ocasión.
Han resaltado lo elegante que iba Swift con unos pantalones negros que resaltaban su delgada figura, unas botas altas y una chaqueta negra. Para darle un toque de color al conjunto, llevaba un gorro rojo muy favorecedor. Y es que se ha convertido en un referente de la moda para la juventud.
