Llegó el final. Despedida y a Miami. Susana Gimenez feliz con un buen rating (“aunque todos los domingos me pusieron Boca o River”); con los Midachi que le hicieron tocar picos de casi 28 puntos y Pablo Echarri presentando el buenísimo trailer de “El elegido”, con una estética que sólo el genio de Gustavo Marra (clave en “Resistiré”) podía lograr al mostrar a sus elitistas personajes caminando por la ciudad de Buenos Aires.
Y como si fuera poco, un musical de Elena Roger con su vuelta a Buenos Aires con “Mina che cosa sei” cantando a Mina. Rara fue la ausencia de Antonio Gasalla, que, por lo que averiguamos, estaba en Punta del Este, descansando. Se lo extrañó en el final, cuando estuvo todo el año.
“No quiero más nada, quiero estar sola“, le contaba Susana a Echarri y antes le contó a los Midachi que “tomo pastilla para dormir” y “no me hablés de llevarse materias” (por su nieta Lucía). Y también le dijo a Echarri que “no lo invito más a Tinelli, porque me dice que sí y después me deja plantada”.
Carlos Baute cantó y pasó y además de los premios fabulosos del final (incluyendo el millón) tuvo al “niño genio” de 12 años que ya va a la Facultad y un final con un brindis con todos sus invitados y la conductora deseando “feliz año, porque va a ser difícil el año que viene que elegimos presidente”.
Susana Gimenez trabajó siete meses en este 2010 y mantuvo un buen nivel de audiencia, sin estridencias. Un año parejo y tranquilo. Un romance corto con Popiloff y los cheques falsificados de Jorge Rama, fueron sus temas públicos del año.
