Un escalador francés logró este lunes el increíble mérito de haber ascendido por la ladera no de un pico nevado, sino de una torre espejada de Dubai, en los Emiratos Árabes. El hombre, conocido como "spiderman", hizo cumbre a los 828 metros. Alain Robert, de 48 años, puede decir que llegó a la cima de la civilización, y no por un avance tecnológico, sino por su propia destreza, ya que subió los 828 metros de altura de la torre Burj Jalif, la más alta del mundo.Era cuestión de tiempo para que Robert, quien paradójicamente sufre de vértigo crónico, intentara romper un nuevo récord después de haber escalado la torre Eiffel de París o el Empire State de Nueva York. En esta oportunidad, el francés lo hizo en el marco de la conferencia "Educación sin fronteras".
"Sin duda alguna, que Alain Robert suba la torre de Burj Jalif es un evento excepcional y un logro sin precedentes", rescató Ahmed al Matrushi, representante de la compañía inmobiliaria Emar. El francés tardó entre 6 y 7 horas en ascender, sin arneses, hasta la azotea.
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