Pero el cambio todavía no llega y él no da más de la ansiedad por sentirse “adulto” y ser un candidato con mayor posibilidad entre las “chicas grandes” que tanto le gustan.
Como Justin es de esas personas que gustan de tomar el toro por las astas contrató a Danny Musico, un entrenador personal muy famoso entre las celebridades, para que le ayude a trabajar su musculatura.
¿Su objetivo? Quiere convertirse en un ídolo adolescente que haga furor entre las chicas más grandes, como en algún momento lo hicieron Nick Lachey y Justin Timberlake.
¿No les parece que es mucho pedir para sus cortos 16 años?
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